El Directorio Nacional del Colegio de Arquitectos de Chile hace extensivas sus condolencias por el sensible fallecimiento del Arquitecto Ignacio Santa María Santa Cruz (ICA 704), miembro reconocido de la Orden, y que fuera destacado en 1998 con el Premio Nacional de Urbanismo, cuyo fin es reconocer la trayectoria de arquitectos y otros profesionales chilenos que se hayan destacado por su excelencia, creatividad y aporte trascendente a la calidad de vida de los habitantes de las ciudades de nuestro país.
PREMIO NACIONAL DE URBANISMO 1998: IGNACIO SANTA MARIA
Por Arquitecto Víctor Gubbins B.
El Premio Nacional de Urbanismo fue creado por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo en 1996, y otorgado por vez primera ese año al arquitecto Juan Parrocchia, titulado en la Universidad de Chile.
En conformidad al reciente fallo consensual del Jurado compuesto por personalidades representando a instituciones nacionales vinculadas al tema, el Premio Nacional de Urbanismo 1998 ha sido otorgado por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo al arquitecto Ignacio Santa María Santa Cruz, profesional titulado en la Pontificia Universidad Católica de Chile y quien se ha caracterizado por una trayectoria dedicada a los temas territoriales y urbanos, cubriendo áreas de docencia, proyectos y obras, extensión y difusión.
En materia docente, el arq. Santa María exhibe cincuenta y seis años de experiencia a nivel universitario, de pre y postgrado, la cual inicialmente se centró en la Pontificia Universidad Católica de Chile, tanto en la Escuela de Arquitectura como en el Instituto de Estudios Urbanos, ampliándose con el tiempo a otras instituciones de educación superior nacionales y extranjeras.
Entre las primeras destacan la Universidad de Chile en Santiago y Valparaíso; la Universidad del Norte; la Universidad Austral; la Universidad Técnica del Estado; las Universidades del Pacífico y de Viña del Mar y en los últimos años en las Universidades Finis Terrae y Andrés Bello.
Entre las segundas y en calidad de profesor invitado, su curriculum incluye a la U. Nacional de Colombia; la U. Central de Quito; la U. Federal de Pernambuco; la U. de la Sorbonne; la U. Téchnologique de Compiègne y varias universidades canadienses de acuerdo a la Beca Canadian Council.
Como docente y a lo largo de su trayectoria académica, el arq. Santa María, ha demostrado una gran capacidad para transmitir a sus alumnos la trascendencia que reviste el tema urbano en particular y los aspectos del territorio en general, esto último, muy vinculado a la escuela francesa de Ordenamiento Territorial y Urbanismo.
Asimismo, ha sido incansable en transmitir esa importancia a las autoridades y opinión pública, denunciando vacíos y falencias en el ámbito urbano, así como la conveniencia de insertar los problemas de vivienda, equipamiento, vialidad y transporte en una visión global y comprensiva de la ciudad como un todo, analizándola tanto en su complejidad, como en su vinculación con el desarrollo nacional.
Un ejemplo de esta actitud, es la cantidad de artículos publicados en la prensa y en revistas especializadas, así como su alta participación en seminarios y comisiones de trabajo relativos a la temática.
En el campo de las propuestas urbanas y en el ejercicio privado de su profesión, le ha correspondido desde el año 1955, llevar adelante varias decenas de planes reguladores, planes regionales de desarrollo, planes seccionales, planes de localización industrial y proyectos de remodelación urbana.
Entre estos últimos conviene destacar en la década del sesenta, los proyectos de Remodelación de Santa Ana – ubicada en calles Rosas y Riquelme – y Remodelación San José – ubicada en calles Moneda, A. Barroso, Agustinas y Riquelme -, ambas iniciativas pioneras en la recuperación habitacional del casco antiguo de Santiago Poniente, dentro de una escala apropiada con el barrio tradicional.
Complementando estas actividades, debemos mencionar su participación activa en instituciones y sociedades nacionales y extranjeras vinculadas con el tema, ya sea en su organización como en seminarios y encuentros, tales como el Colegio de Arquitectos de Chile; Sociedad Chilena de Planificación; Sociedad Interamericana de Planificación; AID; PNUD-OIT; PNUMA-CEPAL y HABITAT-ONU.
Finalmente, no podemos dejar de mencionar sus cualidades de animador de iniciativas de bien público; su personal y permanente entusiasmo; su plena vigencia en denunciar y exponer temas de frontera en el campo del urbanismo; su amplitud de visión enriquecida con aproximaciones certeras en materias como historia del urbanismo, regionalización, pobreza urbana, normativa e instrumentos de planificación.
A lo largo de su ejercicio profesional, ha sido un formador en la docencia y en la conciencia pública, con mucho esfuerzo personal, más allá aún de las instituciones a las cuales en esos momentos haya pertenecido.
Por lo tanto, con fundados merecimientos el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, concede este año 1998, el Premio de Urbanismo al arquitecto Ignacio Santa María Santa Cruz.
Fuente Imagen: Facultad de Arquitectura, Arte y Diseño UNAB
Una pena su deceso.
Fue un excelente docente y profesional de gran calidad humana.
Saludos eternos.
Un Amigo, un Maestro, un Loco, un Visionario, un Hermano.-
Grande tatita Ignacio.-
Mis condolencias para toda la familia de Ignacio. Una gran perdida para la arquitectura y el urbanismo de nuestro pais.
Gran maestro, gran profesional y gran persona, condolencias a la familia.
Un alucinante y apasionado profesor, tenia una manera inigualable de exponer su pensar. Gracias por tener el honor de haberlo escuchado.
Muchas gracias y descanse en paz.
Gran Profesor. Un hombre sabio: “debe considerarse la naturaleza humana para planificar, sino todo esfuerzo está perdido” mensaje que dejó impreso en mi mente. Lo extrañará la academia, lo perdemos todos, el Estado de Chile también. Mis condolencias a su familia.
Sabio, crítico, alegre y sensible, pero por sobre todo inteligente. Tuve el gran privilegio de ser uno de sus tantos alumnos y su recuerdo permanecerá por siempre. Mis más sentidas condolencias a su familia.
Un gran hombre, tuve la suerte de conocerlo como arquitecto y especialmente como persona cercana. Marcó a muchos arquitectos con su visión social y el ejemplo ético en el ejercicio de la profesión.
El profesor más cariñoso, relajado y simpático que he tenido. Me paraba en el patio de la escuela y le decía a mis compañeros que tenía el rostro más hermoso del campus. así es que simplemente lo adoraba. Nunca lo olvide. Pilar