T2: encontradas reacciones generó fuerte respaldo del Gobierno al proyecto

Alcalde Sharp señaló que “no cuenta con el apoyo de la ciudad”, mientras que sector marítimo valoró gesto.

Una serie de reacciones a favor y en contra generó el decidido apoyo del Gobierno al proyecto de ampliación del Terminal Dos, que se concretó en la visita de tres ministros a Valparaíso. Un acto que, al igual que la obra, no pasó indiferente.

“La ciudad no tiene su apoyo definido al Terminal Dos y eso básicamente tiene que ver con que el proyecto sigue sin dialogar con claridad con el desarrollo de la ciudad y con el resto de sus vocaciones, y mientras eso no tenga lugar es difícil que la ciudad le dé el apoyo a una iniciativa de esas características”, dijo el alcalde porteño, Jorge Sharp, quien señaló que si bien no está en contra del desarrollo del sector, afirmó que éste no puede “darse a costa de la ciudad”. “No estamos en contra del desarrollo portuario sino de la forma en que se están haciendo las cosas que no representan los intereses de Valparaíso”.

 

Vinculaciones

El jefe comunal señala que antes de analizar compensaciones se debe hablar de vinculaciones más concretas. “Valparaíso requiere para poder financiar el modelo de desarrollo que sueñan todos los porteños una fuente independiente a las establecidas por ley. Eso puede ser una ley portuaria, un royalty o cualquier instrumento que brinde un compromiso más claro de la empresa portuaria”.

En esa línea agregó que “el Gobierno tiene que reflexionar porque el proyecto, tal cual está, no cuenta con el apoyo de la ciudad, creo que es importante que exista un diálogo y que lo que se haga se vincule armónicamente con el resto del desarrollo de Valparaíso”.

Para el senador Ricardo Lagos Weber (PPD) lo ocurrido es una muestra de que “el Gobierno se tomó en serio el informe del experto Juan Luis Isaza”.

“Ese informe fue pedido y financiado por el gobierno chileno para hacerse cargo del impacto patrimonial que tiene el actual proyecto del T2 y señala que, como está, va a tener efectos negativos, permanentes e inmitigables para la ciudad de Valparaíso”, recalcó.

El parlamentario agregó que junto a los ministros, deberían haber marcado presencia otros estamentos. “Pensé que en la actividad iba a ver un debate sobre el impacto del proyecto y fue una actividad de marketing ¿Dónde estuvo la alcaldía de Valparaíso, el Colegio de Arquitectos o los sectores que tienen una mirada crítica a partir del informe Isaza, o el Consejo de Monumentos Nacionales?”, enfatizó el legislador, agregando que esperaba que, tras ese documento, se conformara una comisión para estudiar eventuales compensaciones. “Pienso que se perdió una oportunidad”.

 

Sector marítimo

En el sector marítimo portuario también hay distintas miradas de lo acontecido. “Me parece muy bien que el Gobierno dé el respaldo y apoyo al T2 como también lo tiene que dar a cualquier iniciativa de desarrollo de infraestructura portuaria en el país”, subrayó el gerente general de la Asociación Nacional de Armadores (ANA), Ricardo Tejada, apuntando que también deberían existir definiciones respecto al Puerto de Gran Escala (PGE).

“Recordemos que en el momento que se toma la decisión de construir un puerto de esta envergadura no pasan menos de ocho años hasta que se termina el proyecto”, sentenció el ejecutivo, añadiendo que el país debe estar preparado para un eventual aumento del comercio internacional. “Para mover esa carga se requieren puertos capaces de soportar no sólo a la nave, sino que también a la red logística que está detrás”, dijo.

El presidente de la Federación Regional de Dueños de Camiones (Fedequinta), José Egido, valoró la señal. “Se agradece alguna coincidencia con los ministerios de Transportes y Obras Públicas. Valparaíso depende en más del 30% de sus actividades marítimo portuarias, por lo tanto ciframos muchas expectativas en que se plasme el desarrollo en ese sector”, manifestó el líder gremial.

Sin embargo, acotó que cualquier inversión en los puertos, ya sea Valparaíso o San Antonio, “deben ir sí o sí de la mano con la inversión de infraestructura vial , nada sacamos con ampliar el faldón de los puertos sin carreteras que a lo menos empaten la demanda de camiones”.

En tanto los trabajadores agrupados en la Coordinadora Marítima Portuaria de Valparaíso -que se mantienen en disputa con la EPV por el tema de las cargas limpias- calificaron lo acontecido como “un show mediático, que tuvo como único fin ocultar el conflicto de los aforos”.

A través de un comunicado, criticaron al Gobierno por no haber sido capaz de establecer puntos de diálogo para resolver el problema que reclaman.

“Lamentamos que autoridades de Gobierno se presten para este tipo de actos y que estos mismos no sean capaces de reunirse con los dirigentes de nuestra agrupación para abordar la real problemática que afecta al puerto de Valparaíso y que está provocando pérdidas de turnos y afectando la competitividad”.

En tanto, el representante de la Coordinadora en Defensa de las Ciudades Puerto ante la Unesco, Arturo Michell recalcó que “las esperanzas de las organizaciones que participaron de buena fe ante la comisión Mall Barón y dieron crédito a las conclusiones del Informe Isaza respecto al Terminal 2, han ido poco a poco desvaneciéndose por la actuación del Estado de Chile, que, en los hechos más allá de sus buenas intenciones, está actuando sin flexibilidad alguna- para imponer sus dos megaproyectos”.

“El Gobierno tiene que reflexionar porque el proyecto, tal cual está, no cuenta con el apoyo de la ciudad” Jorge Sharp Alcalde de Valparaíso.

 

EL ANUNCIO DE MEGAPUERTO

Otro de los temas que también generó reacciones fue la ubicación del futuro Puerto de Gran Escala (PGE) donde, según dijo la ministra de Transportes, Paola Tapia, aún no hay definiciones. “Hay que pensar en que si sólo se construye un megapuerto, cualquier contingencia coyuntural como un sismo o un accidente puede liquidar la capacidad portuaria del país completo durante semanas o meses, por lo tanto no se puede pensar en uno solo”, comentó el presidente de Fedequinta, José Egido. “A mi juicio, el proyecto portuario necesariamente debe contemplar a Valparaíso y San Antonio a la vez”, dijo.

 

Por C. Ramírez / P. Navia

Publicado en El Mercurio de Valparaíso