La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Vivienda y Desarrollo Urbano Sostenible, Hábitat III, se realizó en la ciudad Quito, Ecuador, en el mes de octubre. Este encuentro mundial buscó definir una Nueva Agenda mundial sobre estos temas para los próximos veinte años.
Llegó hasta ese país una delegación integrada por la Presidenta del Colegio de Arquitectos de Chile, Pilar Urrejola, junto a otros representantes del CA: Ximena Bórquez (Vicepresidenta de Asuntos Internos), Juan Pablo Urrutia (Secretario General), Pablo Fuentes (Director Nacional) y otros miembros, entre ellos el Curador de la XX Bienal de Arquitectura, Felipe Vera. Todos tuvieron una destacada participación en el evento (ver más).
Dentro de las actividades paralelas a la Conferencia, el Colegio de Arquitectos de Chile organizó una sesión con la red de expertos latinoamericanos, y con las instituciones Cities Alliance, BID, CITE-FLACSO Ecuador y GIZ, a la que asistieron más de cien personas, conformando un equipo de trabajo en torno a los mismos temas de la agenda Hábitat III. Como resultado de esta actividad, se organizarán futuras reuniones para establecer un sistema de seguimiento de la aplicación de la Nueva Agenda Urbana en los países de Latinoamérica.
A continuación se adjunta el Proyecto de documento final de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre la Vivienda y el Desarrollo Urbano Sostenible, Habitat III (ver), el cual fue suscrito por Chile y todos los países participantes y miembros de las Naciones Unidas.
“Hay un compromiso gubernamental de los países que participaron y aceptaron cumplir con los acuerdos en la Conferencia. Chile es uno de ellos y si bien estas conferencias no son estrictamente vinculantes, sí hay una responsabilidad política y moral detrás”, explica Ximena Bórquez.
Como Institución no se participó directamente en la redacción del documento, pero sí fue aceptada por sus miembros: “Conocemos la Agenda, concordamos con los contenidos, pero vemos que Chile está aún lejos de cumplir los objetivos. Como Colegio debemos asumir la tarea de difundir y vigilar el cumplimiento de esta Agenda; estudiarla para definir los próximos pasos y empezar a verificar que el Estado de Chile la asuma dentro de sus políticas públicas”, agrega.