Mientras la Municipalidad de Santiago está en proceso de modificación de su Plan Regulador con el fin de proteger su Patrimonio Arquitectónico y Urbano, y analiza entre otros temas la limitación de salientes e incorpora normas de cierre para los sitios abandonados; el proceso se ha estado haciendo con la participación de las comunidades y vecinos.
El Colegio de Arquitectos de Chile ha decidido manifestarse y apoyar el trabajo realizado por el Municipio de Santiago, con las normativas que pretende introducir al Plan Regulador, entendiendo que estas apuntan de manera efectiva a mejorar la calidad de vida de los residentes y de quienes visitan la comuna.
Frente a críticas que han surgido en relación a la protección del Patrimonio, el Comité de Patrimonio del mismo Colegio de Arquitectos considera que esta es una iniciativa que abre camino a que otros municipios protejan y cuiden su ciudad; y si bien podemos compartir la base de las dudas y aprehensiones de los ciudadanos, éstas se resuelven creando instrumentos para apoyar la conservación de los inmuebles y no manteniéndolas en el abandono.
Los planes reguladores buscan un mejor desarrollo para las ciudades y en este sentido deben conciliar reglas claras, una idea consensuada de ciudad y flexibilidad frente a los cambios propios de una sociedad dinámica.
Bajo esta decisión, el Colegio de Arquitectos de Chile está abierto a un debate franco y abierto sobre los cambios y el devenir que debe tener la comuna de Santiago y todas las ciudades del país.
me parece que los arquitectos, que son parte de los pilares arquitectonicos de una ciudad, deben manifestarse ante los cambios que plantee una municipalidad con una mirada de respeto por el medio ambiente y los habitantes de ella, como asi mismo para evitar la intervención drastica al patrimonio cultural.