Entre organizadores, voluntarios y, sobre todo, personas interesadas en conocer y recorrer sitios de interés patrimonial, histórico y arquitectónico, el Festival Castro Abierto convocó a más de 1400 asistentes, superando así todas las expectativas planteadas en los orígenes del proyecto.
Un ambiente marcado por el encuentro, confianza y diálogos recorrieron las dos jornadas y fueron fluyendo en cada una de las visitas a los 17 espacios de interés, entre los que destacaron la Isla Lebe, el edificio del Cecrea en calle Lillo, la comunidad williche Alto Fundo de Gamboa y el mirador arqueológico en la puntilla de Ten Ten, cada uno con entre 50 y 100 visitantes en cada recorrido.
“Como organizadores nos deja felices que el espíritu con el que instalamos esta actividad se cumplió y superó las expectativas, creando espacios reflexivos”, indicó Ivette Quezada, de Fundación Aldea, organización gestora del evento.
Castro Abierto se concretó también gracias a la colaboración de la Delegación Zonal Chiloé del Colegio de Arquitectos de Chile, junto a otras entidades como el Instituto Nacional de la Juventud-Injuv, la Municipalidad de Castro, la Seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio de Los Lagos, Fundación ProCultura, la Corporación de Estudios Urbanos y Arquitectónicos de Chiloé, la Asociación de Carpinteros Patrimoniales, el Colectivo Piño, la Asociación de Ilustradores de Chiloé y AAVS Chiloé Archipiélago, entre otros.
Para Alejandra Carvajal, Directora para Castro de la Delegación Zonal Chiloé del Colegio de Arquitectos de Chile, formar parte de un evento de esta envergadura es motivo de orgullo: “Tuvimos la posibilidad de mostrar nuestra arquitectura regional, en este caso de Chiloé. Ha sido un éxito para nuestra visión como Colegio de Arquitectos presentar la arquitectura a nivel local y ver cómo la gente de Castro ha podido participar de este evento”.