Con 61 postulaciones y sus respectivos proyectos cerró este lunes 17 de marzo a las 16:00 horas la recepción de propuestas para el Concurso Nacional de anteproyectos de arquitectura para la construcción del Museo Memorial del de la ex Villa San Luis de Las Condes, cuyos vestigios son Monumento Nacional, en la categoría de Monumento Histórico, desde 2017.
Este concurso es fruto de un acuerdo impulsado por la Subsecretaría del Patrimonio Cultural y el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN) con expobladores de Villa San Luis y la Inmobiliaria Presidente Riesco, con patrocinio del Colegio de Arquitectos de Chile (CA) y la Asociación de Oficinas de Arquitectos (AOA). Tras la recepción de las postulaciones, ahora, se pasará a la etapa de evaluación, con un jurado especializado, que se reunirá a fines de marzo. Así, el proyecto ganador podría conocerse a inicios de abril.
El memorial –que será financiado por la Inmobiliaria Presidente Riesco- tendrá una superficie de hasta 800 m2 construidos, conservará la altura original del edificio aún existente (10,62 metros máximo) y se complementará con paisajismo para habilitar un espacio privado de uso público. Toda esa zona se mantendrá protegida como monumento histórico, abarcando 1.000 m2 de terreno aproximadamente.
El concurso está a cargo del arquitecto Yves Besançon Prats, miembro de la AOA, quien ha sido apoyado por su colega Igor Rosenmann Becerra, del Colegio de Arquitectos de Chile, quien asumirá el rol de asesor. Por su parte, el jurado será presidido por la subsecretaria del Patrimonio Cultural y presidenta del CMN, Carolina Pérez Dattari, e integrado por miembros nominados por todas las partes involucradas: la Constructora Presidente Riesco, la AOA, el Colegio de Arquitectos, ex pobladores de la villa y otros por nombrar aún.
El Memorial busca recordar un proyecto que fue expresión de un plan de urbanización y edificación que pretendió combatir, en su tiempo, la creciente segregación social urbana de la ciudad. El conjunto habitacional, construido bajo el gobierno de la Unidad Popular, fue orientado como residencias para familias de escasos recursos, habitantes de campamentos de la comuna de Las Condes, con un sentido de integración social, y llegó a albergar a mil familias. No obstante, en 1976 se inició un proceso de desalojo por parte del Ejército. Argumentando que sus habitantes no poseían títulos de dominio, los habitantes fueron reasentados contra su voluntad en comunas periféricas.
Por eso, el proyecto se concibe como un lugar de encuentro de memoria, de participación ciudadana, de reflexión y aprendizaje de quienes visiten el recinto, emplazado en uno de los principales centros financieros del país, situado en la comuna de Las Condes. Para ello, se podrán utilizar los restos del edificio histórico existente, el mítico block 14, y su huella en el terreno, además de un proyecto de paisajismo.